Lección 77

Tengo derecho a los milagros

He pedido la salvación del mundo así como la mía. He pedido que se me concedan los medios a través de los cuales se puede lograr esto. Es imposible que no se me den garantías al respecto. No estoy sino pidiendo que se haga la Voluntad de Dios.

Mi derecho a los milagros no se basa en las ilusiones que tengo acerca de mi mismo. No depende de ningún poder mágico que me haya adscrito ni de ninguno de los rituales que he ingeniado. Es inherente a la verdad de lo que soy. Está implícito en lo que Dios, mi padre es. Mi derecho a los milagros quedó establecido en mi creación y está garantizado por las leyes de Dios.

Hoy reivindicaré los milagros a que los que tengo derecho pues me pertenecen. Se me ha prometido total liberación del mundo que construí. Se me ha asegurado que el Reino de Dios se encuentra dentro de mi y que jamás lo puedo perder. No pido sino lo que en verdad me pertenece. Hoy sin embargo me aseguraré también de no conformarme con menos.

• Tengo derecho a los milagros.

Pediré cada ves que tenga una situación que los requiera. Si me asalta la tentación:

• No intercambiaré milagros por resentimientos.
• Quiero únicamente lo que me pertenece.
• Dios ha establecido mi derecho a los milagros.

Éxito y gracias por los milagros recibidos el día de hoy.